Este blog es un experimento, así que como tal tiene un objetivo. El objetivo de Diario-Ideario es aprovechar las herramientas que brinda la tecnología de hoy en día y hacer un ejercicio intelectual para expresar opiniones sobre temas de actualidad.
El resultado del experimento serán sus respuestas. :)

viernes, 27 de enero de 2012

Los desastres previsibles

Hace unos días recomencé mi lectura en portugués del autor Lima Barreto quien era originario de Río de Janeiro. El libro es una recopilación de textos publicados en varios periódicos locales a comienzos del s. XX en los cuales expresa sus críticas al gobierno por la pobreza y la mala administración de las políticas públicas del país y en aquel entonces de su capital.

Los artículos son vigentes definitivamente, y no sólo aplicables para Río de Janeiro, una de las ciudades más pobladas del continente y del mundo, famosa por su colorido y playas, así como su carnaval, Pao de Azucar y Cristo do Corcovado; también aplica para aquellas ciudades en dónde el crecimiento demográfico supera el crecimiento del presupuesto otorgado a la mejora de las mismas.

Uno de los artículos es una carta dirigida al presidente municipal sobre el cual habla de la falta de obras de ingeniería hidráulica en la ciudad para evitar las inundaciones en tiempos de lluvia, ya que el agua de las montañas desemboca en el centro de la ciudad dificultando el transporte y la  comunicación de manera frecuente afectado a sus habitantes recurrentemente sin que se aplique una solución. Sin embargo resalta que se destinan ingresos de la ciudad  a promover otras actividades relacionadas con el turismo y el entretenimiento de los visitantes.

El día de ayer un edificio de 20 pisos en el centro de Río se derrumbó, es noticia internacional, seis muertos y 16 desaparecidos.  Las causas al parecer fueron problemas en la estructura del edificio.  Generalmente los edificios colapsan cuando suceden desastres naturales como inundaciones, terremotos, tsunamis o deslaves, este no es el caso. ¿Cómo explicar que de un momento a otro un edificio se desvanece con personas dentro sin que una torrente de agua o de tierra impacte al edificio?¿Cómo es que no se tenía un control de seguridad de inmuebles de riesgo? ¿Estarían las autoridades concentrando su atención en las medidas de seguridad en el sambodromo para el carnaval que se acerca? ¿Cómo saber si hay más edificios que peligran caer sin más anticipación que la del sonido de los vidrios cayendo al suelo?

Me aventuraré a pensar que Lima Barreto escribiría una carta con cuestiones similares ¿le sorprendería saber que más de cien años después en la ciudad hay muchos (por no decir miles) problemas sin resolver?
**Conocí la ciudad de Río de Janeiro en el año 2006, desde entonces es una de mis ciudades favoritas. Río es mágico, sus pintorescas calles y edificios coloniales, el malecón blanquinegro es Copa Cabana e Ipanema, el contraste entre la vegetación abundante, los edificios habitacionales y la playa, el mar, la arena y el horizonte infinito. Si pueden conocerla háganlo, esperemos el problema de los edificios antiguos ya haya sido resuelto para entonces.